Beatriz Espinoza
Aprender a conocer otros beneficios de los desechos de la pesca y compartirlo con los propios pescadores, ha contribuido a tener un mejor rendimiento en esta actividad y una importante disminución en el daño que éstos causan a la fauna marina por contaminación.
Lo anterior es una afirmación de la doctora Giselle Daniela Ríos Herrera quien habló de los desperdicios con beneficio y aprovechamiento de los desechos pesqueros en una participación como invitada en la más reciente emisión del programa radiofónico “Alimentación, problema de nuestro tiempo”.
En la charla que sostuvo con el conductor del programa, Francisco Javier Parra Vergara a través de la frecuencia de Radio Universidad (105.7 FM) resaltó la importancia del tratamiento a profundidad del tema de los desperdicios en cuanto a su beneficio y aprovechamiento.
“Es muy importante investigar sobre el tema, buscar nuevas alternativas de transformación de estos desechos que sean viables tanto por el tema ambiental como por la parte económica a fin de hacerlo redituable para todo el sector productivo y que esas mismas alternativas permitan, además, la generación de nuevos empleos”, expresó.
Más volumen, más captura
Giselle Ríos, quien es miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), destacó la importancia de estudiar esta área de la actividad pesquera debido a que cada año, la producción pesquera y la acuícola en México nos sorprende con más volumen, con más captura.
“Imagínate todas las capturas que tenemos en México, en nuestras costas, alrededor del 50% corresponde sólo a desechos no aprovechados para la alimentación humana, y entonces, hay qué pensar qué hacer porque si no, esto se convierte en un problema ambiental en el futuro”, precisó.
En esto, añadió, tenemos piel, aletas, espinas y las vísceras, entre otras que representan entre el 18 y el 20 % del peso del organismo y ahí tenemos bastante material para transformarlo y buscar cómo aprovecharlo.
La investigadora universitaria señaló que la cantidad de desechos es tan grande se convierte en un daño más al ser compuestos orgánicos de muy fácil y rápida descomposición.
“Primero, queremos evitar los problemas ambientales y deshacerse de los desechos de una manera eficiente buscando el aprovechamiento de esos residuos que impacte de manera positiva, tanto en la ecología a través del cuidado del medio ambiente buscando alternativas amigables que al final, sean de gran relevancia económica y social”, agregó.
Explicó que cada parte de estos organismos, como la piel, las espinas, la vejiga natatoria, son desechos, excelente fuente de colágeno y gelatina y tienen importantes aplicaciones tecnológicas e industriales.
“Estos hidrolizados de proteína forman péptidos más pequeños fáciles de absorber por otros organismos como el camarón que puede hacerlo crecer más rápido, generando talla y peso más rápido; además, los hidrolizados, se ha encontrado que ayudan a conservar el valor nutritivo de la proteína. Tienen valor agregado y son productos funcionales.”, argumentó.
Giselle Ríos dijo que hay otras aplicaciones que se han encontrado como es el caso del tratamiento de los intestinos, por mencionar otro desecho súper importante, se pueden extraer encimas que se pueden utilizar para hidrolizar al resto de los desechos.
En el ámbito de la industria, la investigadora señaló que estos resultados ya han sido aplicados en forma parcial pudiéndose hablar de productos como la harina de pescado con sus grandes ventajas o también, en otras áreas como suele ser lo artístico o artesanal.
La doctora se encuentra actualmente trabajando en Mazatlán, Sinaloa, en el desarrollo del aislamiento de encimas proteolíticas de una especie endémica de la región llamada Chihuahua de Panamensis buscando más alternativas para aprovechar sus enzimas.
“Todos los desechos, cabezas, piel, los retazos de lo que queda de músculo, todo lo estamos hidrolizando buscando propiedades bio-activas que tengan capacidad antioxidante y seguimos probando las enzimas proteolíticas”, apuntó.
